sábado, 18 de junio de 2011

Asad les avisó a Pereyra, Placente, Rusculleda, Herner y San Román que no los tendrá en cuenta. JM Torres ya ni fue.


El club se ahorra casi 2.000.000 de verdes.La alarma se había encendido luego del entrenamiento del lunes, en el que el DT, honesto con su promesa de depurar el plantel, borró a un grupete de referentes de la lista de concentrados para enfrentar a Newell’s en el Coloso. Sin embargo, el petardo explotó en la última práctica matutina: el Turco les comunicó a Guillermo Pereyra, Diego Herner, Sebastián Rusculleda, Diego Placente y José San Román que no formarán parte del plantel que afrontará la próxima temporada. Es más: Juan Manuel Torres, quien presagiaba el punto final para su etapa de cuatro años en el Ciclón, ni siquiera se presentó en el Nuevo Gasómetro (tiene todo arreglado con el Metalist Kharkiv de Ucrania).

“Entiendan que debí tomar una decisión horrible, que a los técnicos no nos gusta nada, con poco tiempo para estudiarlos en detalle. Ustedes saben cómo se manejan estos temas: nos sentamos a hablar con los dirigentes y decidimos que no sigan con nosotros. Quedan libres para buscarse un club”, les explicó, didáctico, el coach en una charla que duró alrededor de media hora.

Pese a que el Turco insinuó que la borratina (más cantada que el Himno Nacional) se debió puramente a una cuestión de gusto futbolístico, el trasfondo de la determinación responde básicamente a la necesidad imperiosa de reducir los egresos de la institución. Claro, el contrato de los seis muchachos que no continuarán (a excepción del de San Román, que caduca a mediados de 2012, todos culminan a fin de este mes) representan un gasto anual de más de 1.800.000 dólares. Para colmo, como el equipo no se clasificó a la Copa Sudamericana 2011 (casi ni peleó por ingresar), la CD entiende que no es necesario contar con dos hombres por puesto.

Otro que puede emigrar del Ciclón para recortar el presupuesto del plantel (en CD se habló de que no supere los 24.000.000 de dólares por año) es Damián Albil. Es que, para permanecer en San Lorenzo, el arquero pretende que el club le compre el pase, lo que implica un esfuerzo económico que el club no está en condiciones de encarar. “No creo que se tenga que ir alguno más, pero nada está cerrado”, contó el Turco. ¿Continuará?

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